Obra escrita por la española Ana Belen Beas, con la dirección musical de Angel Malher y la dirección artística de Ariel del Mastro.
Luz Cenicienta es un mega espectáculo, coproducción argentina - española , que estará solo unos meses en cartel en Buenos Aires, ya que luego se presentará en Madrid y la idea de los realizadores es que esta obra gire por el mundo.
Por ello, el espectador no debe sorprenderse, por el enorme despliegue que tiene este musical, más de 30 artistas en escena, iluminación de última tecnología y una pantalla gigante de fondo, en el que se proyectan imágenes realmente deslumbrantes y que le dán a la puesta una belleza visual que debemos destacar.
Este clásico infantil de Cenicienta, en este caso es una versión original ideada por la joven y talentosa Ana Belen, donde aparece la Luna, como su fiel compañera, esta Cenicienta se llama Lucía y tiene sangre gitana en sus venas. Además la pieza está ideada para seducir al público adulto, con algunos guiños muy particulares. La idea es presentar un espectáculo atractivo para toda la familia, el desafío no es sencillo, pero gracias a la enorme puesta en escena y la valía del elenco reunido, logra su objetivo y en nuestra opinión, esta versión local está más adaptada para un público adulto, que infantil, aunque el mix puede funcionar, siendo esta tal vez la asignatura pendiente que la obra debe resolver y definir.
Hablando del elenco, es realmente importante en nombres y en talento, la figura convocante del espectáculo es indudablemente Moria Casán, aquí como Petra, la malvada madastra. Con una gran presencia, su imponente figura tiene un magnetismo total con la platea, algunos la aman, otros la odian por su papel de mala, pero nunca pasa inadvertida. En la obra se maneja con absoluta soltura y en algún momento hasta se permite jugar algún chascarrillo con el tema las joyas.
Si bien Moría, es la figura principal del show, el protagónico lo tiene Ana Belen Beas, esta bella actriz y cantante española, que además de ser la creadora de la historia, nos regala una actuación deliciosa como Lucía, esta Cenicienta gitana , que nos ofrece hermosas coreografías y se luce muchísimo en las partes cantadas, mostrando todo su talento y que está a la altura del desafío, de ser la figura central de la pieza, que ella misma ideó.
El coprotagonista, es nada menos que Maximiliano Guerra, un príncipe gitano y mujeriego, que llega al pueblito perdido donde se desarolla la historia y donde conocerá a la bella Lucía, gracias a una fiesta que le organizan sus primos.
El mayor lucimiento de Maximiliano, logicamente lo tiene en las partes bailadas, donde las ingeniosas coreografías planteadas por Mariela Anchipi, permiten que veamos alguno de sus pasos clásicos y del virtuosismo que lo hicieron famoso en el mundo del ballet, siendo este un gran lujo que se permite la pieza.
Pero el elenco no se detiene en estas 3 figuras centrales, ya que aparece Gladys Florimonte como una de las hermanastras, con su particular gracias que le queda justo al personaje y divierte mucho al público.
Una actuación lucídisima del talentoso e histriónico Jilguero Leandro Gazzia, la gracia del apoderado Julian Pucheta que compone un gran personaje, el sordo Diego Hodara, el primo Pablo Sultani y los papeles femeninos muy destacados de Sabrna Artaza como la bella Rosa, Maia Contreras ( Juana ) y Andrea Lovera ( Dolores )
Al leer estas lineas, ya se darán cuenta de la riqueza del elenco, siendo este otro signo inequívoco, que estamos en presencia de una mega producción de proporciones.
Y debemos mencionar también a los integrantes del Ensamble, que con sus coordinadas y poéticas coreografías, dán un valor agregado a la obra.
Debemos dedicar un párrafo especial, al variadísimo diseño de vestuario que tiene la puesta, de la mano de Silvina Falcón, con muchísimos cambios y gran colorido. Una escenografía opulenta y muy bella, contemplan este gran puesta.
En definitiva, una ambiciosa versión de este clásico, donde se nota que hay mucho trabajo y ensayo atrás, con un gran equipo que soporta la puesta, ya que no es sencillo amalgamar tantos recursos que entran en acción e interactúan en escena.
Luz Cenicienta, es una producción de carácter internacional, con un elenco colmado de figuras y talentos, que nos brinda una visión particular y alegre de este clásico infantil, invitándonos a ser niños de nuevo y como reza su slogan, descubrir que la magia existe y puede cambiar nuestra vida, para lograrlo, solo tenemos que mirar para arriba y bailar, siempre bailar.
Pensador Teatral.
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