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miércoles, 28 de septiembre de 2022

Cuerdas

Dramaturgia de Bárbara Colio. Dirección de Manuel González Gil.





Miércoles 21 hs en Picadilly Teatro ( Av. Corrientes 1524 )

Escrita por la autora mexicana Bárbara Colio, llega a la cartelera porteña esta premiada y entrañable obra, que nos propone acompañar en un viaje sanador a tres hermanos que viajarán a Estados Unidos para ver a su padre, sin importar que los haya abandonado cuando eran chicos y que hace más de veinte años que no lo ven. Recibieron una carta, donde les pedía especialmente que viajaran, para ser testigos de su última gran actuación y sin saber muy bien las razones, decidieron hacer esa viaje.

Pasaron muchos años desde que su padre, se fue lejos, no lo volvieron a ver desde su partida, pero se enteraron que se convirtió en un acróbata conocido en el mundo entero y algunos se atreven a decir que es el mejor funanbulista de todos los tiempos. Para el lector desprevenido, contemos que funambulista, es aquel artista que camina sobre una cuerda o alambre tensado a gran altura. Recuerdan muy bien que cuando eran chicos, su padre practicaba con la cuerda en el jardín y quería enseñarles aquel arte a ellos, pero no tuvo éxito en ello.





La trama resulta muy divertida y arrancará con el encuentro de Peter ( Sebastián Dartayete ), Paul ( Juan María Zubiri ) y Prince ( Francisco González Gil ) en el aeropuerto. Se preparan para hacer un viaje, sin estar muy convencidos de si tienen que hacerlo o no. Peter es el organizador, fue el que convocó a sus hermanos y para estimularlos a viajar sacó pasajes en primera, para que se sientan a gusto.

Pronto notaremos que los hermanos no tienen una relación fluida, casi no se ven y parecen saber poco de la vida del otro. Porque habrá ocurrido este distanciamiento ??  Este es uno de los interrogantes que la obra plantea. Otro es porque nunca fueron a visitar al padre famoso que tienen y debieron esperar su invitación luego de tantos años para ir ?. Evidentemente quedaron dolidos, por ese abandono temprano y tal vez por ello, en modo de represalia, ninguno quiso seguir con la pasión acróbata del padre y ni siquiera visitarlo, 





La mayor parte de las acciones se desarrollarán en el aeropuerto y en el propio avión, donde los hermanos discutirán un poco, se contarán a medias en que andan actualmente, tendrán secretos entre ellos y recordarán algunas escenas de la infancia, que sin dudas los marcaron fuertemente, Lo curioso es cada uno tendrá un recuerdo y una visión diferente de los hechos que se vivieron.

No vamos a contar más para mantener la sorpresa, pero les aseguramos que se van a reír mucho con estos hermanos, adultos ya, pero que siguen peleando como cuando eran chicos. Habrá algunos momentos de tensión entre ellos, pero finalmente se impondrá la camaradería y los lazos de sangre que los unen y que los impulsó a emprender el viaje juntos. Dicha travesía tendrá algunos contratiempos, por lo que deberán ver la obra, para descubrir si finalmente los hermanos llegaron a tiempo para ver a su padre, en su presentación de despedida. Y hasta allí vamos a contar.





Ya hablamos de los méritos de una dramaturgia que emociona y divierte, pero entendemos que el gran mérito que tiene la puesta que se presenta en el Picadilly, radica en el muy buen elenco reunido, tres excelentes y jóvenes actores, todos ellos con gran futuro y muy buena trayectoria pese a su juventud. Verlos aquí juntos en Cuerdas, es algo que el espectador disfruta.

Arranquemos por Sebastián Dartayete, un actor que nos encanta y al que recordamos especialmente por su gran actuación en La Reina de la Belleza en El Tinglado, por nombrar solo una de las obras en lo que lo vimos lucirse. Aquí dá vida a Peter el mayor de los hermanos, el más serio, el más fachero y el más organizado de los tres. Tiene una buen pasar económico y le gusta mostrarlo, tal vez esa sea su cobertura, para no mostrar su fragilidad interior y los miedos que arrastra. Gran trabajo el de Sebastián, confirmando su versatilidad y que es un actor con enorme proyección.





Sigamos con Francisco González Gil, el menor de los hermanos y el más rebelde de los tres. A Francisco recordamos haberlo elogiado mucho por sus papeles en Así de Simple y en Yo, Feurbach. Aquí interpreta a un Prince muy carismático y entrador. De chico era el blanco de las bromas de sus hermanos y por momentos parece no olvidarse de ello, aunque su corazón siempre es el que se termina imponiendo. Muy bueno lo de Francisco.

Y para el final dejamos a Juan Martín Zubiri, como Paul, el hermano del medio, siendo sin dudas el personaje más gracioso de la historia. El más niño de los tres, con algunas fobias a cuestas y una sensibilidad que es su sello distintivo. Es la primera vez que vemos a Juan Martín en escena y nos encantó su composición con un histrionismo a flor de piel y generando muchas risas en la platea, que festeja mucho cada unos de sus intervenciones.





Creemos que era justo dedicar unas líneas a las actuaciones, ya que las composiciones así lo ameritaban. Cada personaje tiene sus características bien marcadas y eso se debe al trabajo de los protagonistas que se lucen en lo individual y muestran mucha química en el conjunto logrando potenciar el texto con sus trabajos.

Hay mérito también en Manuel González Gil, el experimentado director, que consigue una puesta muy dinámica, con varios elementos para destacar. Como por ejemplo la muy buena ambientación, que tiene la trama, que con una escenografía austera, consigue que imaginemos a los actores en un aeropuerto o dentro del avión, gracias al diseño lumínico y los sonidos que acompañan el relato. El diseño escenográfico y el vestuario, es otro ítem destacado, responsabilidad de Lula Rojo. Párrafo especial para la música original de Martín Bianchedi, que acompaña muy bien la trama.





Y hasta aquí vamos a contar, Cuerdas es una obra que indaga en las relaciones paternas, dando importancia a algunos hechos de nuestra infancia que puede marcarnos para toda la vida y como muchas veces es necesario, enfrentar las cuentas pendientes y los miedos del pasado, para poder afrontar los desafíos que la vida nos impone de adultos. Y el mensaje esperanzador, es que siempre estamos a tiempo de recomponer vínculos, y sentimos que esa es la razón que explica eso este viaje sanador que emprenden los hermanos

Recomendamos esta entrañable obra, escrita por una destacada dramaturga mexicana, que se presentó en diferentes países con muy buen suceso y que llega a la Argentina, en esta muy atractiva puesta de Manuel González Gil, que divierte y emociona, gracias a las estupendas actuaciones del talentoso elenco reunido. Nada más para agregar, les pedimos que se abrochen los cinturones, apaguen los dispositivos electrónicos durante el despegue y disfruten de esta hermosa propuesta teatral.


Pensador Teatral.



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