Dramaturgia de Iñigo Guardamino. Dirección de Raúl Garavaglia.
Sábados 20 30 hs en Teatro El Extranjero ( Valentín Gómez 3378 )
Texto que llega desde España, de la mano de Iñigo Guardamino, dramaturgo y director bilbaíno, que escribió esta obra buscando retratar lo problemático que puede resultar para los jóvenes conseguir su primer empleo y como la llegada de las aplicaciones de reparto a domicilio, como Rappi o Pedidos Ya en nuestro país, puede ser una salida momentánea, que les permite a los jóvenes conseguir ingresos, siendo sus propios jefes y manteniendo una independencia en cuanto a los horarios en los que deben trabajar.
Este sería el gancho de las empresas de delivery, para enganchar a los jóvenes, disimulando situaciones de precarización laboral y situaciones riesgosas que viven los repartidores en la calle, con el permiso de una legislación laboral flexible, que permite algunas situaciones cuanto menos polémicas, en pos de que muchos adolescentes, consigan su primer empleo. Cuando quien escribe estas líneas era joven, los primeros trabajos eran como cajeros en algún local de comida rápida o vendiendo servicios de ambulancias a domicilio. Hoy con la llegada de los celulares y la tecnología, ser un repartidor resulta una de las salidas laborales más habitual, para quienes arrancan.
La obra nos contará con una muy buena cuota de humor y satirización, la historia de David ( Felipe Martínez Villamil ) un joven al que no le está resultando sencillo dar el paso a la adultez. Recibido recientemente de abogado, no consigue insertarse en el mundo laboral, fracasando de manera estrepitosa en sus últimas entrevistas. En el ámbito familiar tampoco se siente muy cómodo, viviendo con una madre sobreprotectora ( Ro Kreimer ) y añorando por la ausencia de un padre que abandonó el hogar en la pandemia. Y por último en el ámbito amoroso, es donde mejor se lo puede ver, porque tiene una bella novia ( Brenda Raso ) que trabaja como comunity manager de varias empresas a la vez. El problema es que su novia es cultora del poliamor y al no darle exclusividad, David no era su único novio.
Lo laboral era lo que más lo atormentaba y por eso se puso muy contento, cuando consiguió empleo en Hermes, la exitosa empresa de repartos. Los comienzos serian complicados, porque ni su madre, ni su novia estaban conformes que con sus estudios sea delivery y además en el arranque por ser nuevo en la aplicación, los pedidos no le llegaban de manera asidua y se pasaba la mayor parte del tiempo pedaleando sin rumbo o parado en una plaza, esperando que le cayera un pedido salvador. que le reporte una buena propina, porque Hermes no pagaba sueldos fijos y los únicos ingresos provenían de las propinas que le daban los clientes. Por eso la cosa era clara, si no repartía no cobraba.
La obra con mucho humor y exagerando algunas situaciones logra exponer una temática actual y reconocible, donde los jóvenes aceptan trabajar sin tener un sueldo fijo, una obra social y ni siquiera cuentan con una ART que los cubra de un posible accidente en la calle o de que algún delincuente les robe la moto. La dramaturgia con la mirada central en el tema de la problemática laboral, además hablará de poliamor, religión gracias a un compañero de trabajo evangelista y de vínculos familiares conflictivos, con una madre que se mete en todo y un padre ausente que aparecerá de manera casual. Y hasta allí contamos, como dijimos con humor y algunas situaciones exageradas, irá transcurriendo una trama muy entretenida, hasta llegar a un final que no vamos a adelantar.
Momento de hablar de las actuaciones que presenta la obra. son siete los actores en escena y si bien hay algunas diferencias de registro que se aprecian, más que nada por la dispar experiencia de los actores, el balance es positivo y todos consiguen llevar a buen puerto sus personajes, destacando algunos más que otros, pero ninguno desentona y hay trabajos que vamos a destacar especialmente.
Arranquemos por Felipe Martínez Villamil, como David, el protagonista de la historia, que es una verdadera revelación, ya que tiene un desafío importante al estar a cargo de este protagónico y lo resuelve en muy buena forma, dotando a su personaje de frescura y credibilidad. Estando todo el tiempo en escena, Felipe realiza un estupendo trabajo y obtiene muy buen crédito para futuros trabajos. Nos gustó mucho la composición de Brenda Raso, como Marta, la novia de David. Moderna y canchera, es un buen ejemplo de un millenial, hiper conectado. Está muy bien Brenda en su papel.
Sigamos con Ro Kreimer como la madre de David. Muy divertido su personaje, sobreprotectora al máximo con su hijo y disfrutando de su flamante " soltería " disfrutará de sus últimos cartuchos en el amor. Nos reímos mucho con el personaje de Ro. Párrafo especial para Gregory Peck, quien será el representante de Hermes en el escenario, dando cuenta de un personaje tan original como divertido, del que no queremos adelantar demasiado. Pero no seamos injustos con el resto, Roberto Acosta es Samu, repartidor de Hermes y pastor evangélico. Héctor Díaz es el padre de David, que aparecerá de manera casual en la historia y Claudia Seghezzo como una entrevistadora sagaz. Los tres logran aprovechar sus intervenciones.
Y hasta allí vamos a contar, la historia por momentos se hace algo extensa, pero el interés nunca decae y eso se debe a la dinámica de una puesta dirigida por Raúl Garavaglia, que además de ser el director de la obra, fue quien adaptó el texto para introducirle algunas variantes, que lo aggiornen a nuestro país, cambiando algunos modismos y modificando alguna escenas, logrando un muy buen resultado, ya que logra traer un texto escrito en España, a nuestra realidad, mostrando como alguna temas son universales, siendo el del trabajo juvenil y la crisis existencial que se atraviesa en aquella edad, algunos de ellos.
Amarte es un Trabajo Sucio ( Pero Alguien Tiene que Hacerlo ) es el ingenioso título que tiene esta obra, que busca dar visibilidad a ese ejército de ciclistas, que sin importar que haga calor, frío o llueva, irán a toda velocidad por las calles, exponiéndose a diversos riesgos, pero con la idea fija de llegar a tiempo con su pedido, para que el cliente los reciba con una sonrisa, los califique de manera positiva y obviamente les deje una buena propina. Sin dudas una obra que toma una temática muy actual y además de sacarnos una sonrisa, nos hará reflexionar sobre los nuevos trabajos de la sociedad en la que vivimos.
Pensador Teatral.