Dramaturgía de Irene Almus y Dirección Artística de Mariana Giovine.
Teníamos muchas expectativas, en esta obra, que transita su tercer temporada con muy buena respuesta del público y un gran reconocimiento de la crítica especializada, que la nominó como Mejor Musical Off en los Premios Hugo y Mejor Espectáculo Teatro Off Premios ACE.
Y sin suspenso ya digamos, que Espumas de Oriente cubrió ampliamente nuestras expectativas y nos gustó mucho.
La obra que es muy original, nos hace retroceder en el tiempo a las década del 60, para introducirnos en el fascinante mundo del radioteatro, que era el entretenimiento casi obligatorio y exclusivo, de los hogares argentinos, antes de la aparición de la televisión.
Seremos testigos privilegiados de lo que sucede en ese estudio de radio, desde el que se transmite el radioteatro, protagonizado por Mecha Dalbón ( Irene Almus ) una actriz madura y famosa, su partenaire es Fernán Pelesucci ( Luciano Ledesma ), un joven inexperto, que está dando sus primeros pasos y que no puede creer que está junto a una estrella como Mecha,
Pero no están solos, los acompaña el presentador ( Gabriel Virtuoso ), personaje clave de los radioteatros, que es, quien narra la historia, dá los pies a los actores y además se encarga de los efectos especiales, fundamentales en el género y que enriquecen el relato que llega a los oyentes.
Cada día, se genera un nuevo capítulo de este radioteatro musical y la relación entre Mecha y Fernán, se irá estrechando, a medida que se van conociendo, por lo tanto de manera muy inteligente veremos dos historias paralelas, la propia del radioteatro y la real entre la famosa actriz y el principiante, el narrador como atento testigo, de los vaivenes de esa relación, que sin dudas influirá en el desarrollo de los programa.
No vamos a contar más, dejaremos que el espectador cuando vea la obra, descubra si el amor surgirá en aquel estudio radial y si la historia del radioteatro, se cruzará en algún momento con la vida real.
La pieza tiene una muy buena dinámica y un humor muy sano, logrando que el espectador se ria mucho, gracias a este trío de actores, que con sus caras, sus movimientos, sus mímicas y una entrega absoluta, consiguen sonoras carcajadas en la platea.
Hablemos ya de los protagonistas, que son los responsables de que esta obra resulte tan atractiva. Arranquemos por Irene Almus, que además tiene en enorme mérito, de ser la creadora de este bella historia. Su actuación es fantástica, componiendo una auténtica diva del espectáculo de aquellos años, sus caras, sus posturas, sus movimientos, se destacan muchísimo y tiene un histrionismo que sorprende. . Su gran interpretación, hizo que ganara el Premio Hugo a la Mejor Intérprete Musical Femenina en Teatro Off y muy merecido lo tiene.
Felicitamos a Irene, en su doble rol de autora y de protagonista de la pieza.
Sigamos con el presentador del radioteatro, interpretado magistralmente por Gabriel Virtuoso, un actor de experiencia, que con una voz privilegiada y mucha presencia escénica, lleva el relato en gran forma. Conduce en gran forma el relato, sus miradas diferentes para la estrella y para el principiante, sus mohines y hasta la manera en que ejecuta los efectos especiales, llevan a la risa al espectador. Magnífico su trabajo.
Y para el final, nos queda Luciano Ledesma, como Fernán, el joven actor del radioteatro, que poco a poco irá ganando la confianza de Mecha y aumentando su protagonismo. Un disfrute ver sus caras, su expresividad y sus diferentes tonos de voz. Al final de la función, nos enteramos por boca de los protagonistas, que este era el debut de Luciano en la obra, anteriormente el papel lo llevaba adelante Julian Bruno, que salió de gira con su orquesta y que había hecho un " torazo " ( término que se usa en el teatro cuando un actor sale a escena con muy poco ensayo ). Para nosotros que no habíamos visto la obra antes, fue una enorme sorpresa, ya que su actuación fue excelente, sin dudas una revelación y si esta fue su primera presentación, no queremos imaginar, lo que será cuando gane en confianza.
Sin dudas, un trío muy talentoso reunido para la ocasión, que se luce muchísimo, ya que además de sus dotes actorales, muestran también sus condiciones para la música, tocando la guitarra y entonando tango.y milongas que se disfrutan mucho..
A estas interpretaciones tan destacadas, debemos sumarle la puesta que tiene la obra, de la mano de Mariana Giovine, que cuida todos los detalles y le otorga una gran dinámica a esta historia tan entretenida.
Una escenografía sencilla, pero muy bien lograda, con esos micrófonos típicos de la radio dominando la escena y una puerta que servirá para múltiples efectos especiales. Este rubro está en manos Camila Grinstein, al igual que el vestuario, que se destaca mucho, con esos trajes elegantes, que tienen los hombres, el vestuario de Mecha y los sombreros que dan un toque de glamour a la puesta.
Muy buen diseño de luces de Fernando Chacoma y la música original de Julián Bruno también son materias a destacar.
Como pueden ver, sin grandes erogaciones económicas en el off, pero con mucho talento e ingenio, se generan una cantidad de recursos increíbles, puestos al servicio de la obra, que logran darle una gran estética artística.
En definitiva, una propuesta atractiva y muy original, la que nos acerca Espumas de Oriente, con un texto rico e inteligente de Irene Almus, que nos trae a estos tiempos modernos donde reína la teconología, el recuerdo del maravilloso mundo del radioteatro.
Recomendamos fervorosamente la obra, que nos hará reír mucho, disfrutando de las actuaciones deliciosas de este trío talentoso de actores. El aplauso prolongado que los espectadores ofrecen a los protagonistas al final de la función, confirman todos los buenos antecedentes y premios que traía la pieza y es un claro indicador, que estamos en presencia de una obra que de ninguna manera deberíamos dejar de ver.
Pensador Teatral.