Miércoles 21 hs en El Método Kairos ( El Salvador 4530 )
Teníamos mucha ilusión por ver Así de Simple, No sé quien sos, pero te sigo buscando, ya que es una obra del off, que transita su quinta temporada, algo que como siempre decimos, es un claro indicador, que la pieza tiene algún componente especial, que la distingue del resto.
Todos sabemos lo complicado, que es para una obra del teatro independiente, hacer pie, sin publicidad alguna, sólo con el boca a boca como principal aliado, compitiendo entre otras tantas propuestas y lograr permanecer tanto tiempo en cartel, agotando siempre localidades. Además en este caso, recibió numerosas menciones y reconocimientos, entre ellos, 5 Nominaciones a los Premios Estrella de Mar, ya que la obra estuvo
Contemos, que Así de Simple, nació a mediados del 2014, cuando los autores Ignacio Bresso y Sofía González Gil, amigos desde chicos y con varios trabajos juntos, se animaron a escribir una obra que los representaba y que surgía de observarse a ellos mismos y a sus entornos. Ese es el primer gran acierto que tiene esta pieza, moldear una historia simple, real y muy cercana al espectador, que se identifica plenamente con las situaciones que vé, que le resultan claramente familiares.
La historia que nos espera, será la de Joaquín y Clara, una historia de amor y de desamor a la vez. Seres que se quieren, que se eligieron para vivir juntos, pero cuando esto ocurre, irán sintiendo el paso del tiempo, el desgaste de la convivencia, la rutina, el aburrimiento y ver como de a poco, esa llama de amor y de pasión, que tanto calor daba en el inicio de la relación, se irá consumiendo y por más que lo intentan una y otra vez, los conflictos irán creciendo cada vez más y la relación entrará en un callejón sin salda.
Por lo que esa historia de amor del comienzo, de ojos vivaces, de risas alocadas, irá virando, dando lugar a las peleas las discusiones y ese desencanto tan abrumador. El príncipe azul del comienzo, se convertirá en calabaza y ahora la única preocupación, se enfoca en buscar, la mejor forma de separarse del otro, como si esto fuera posible, ya que en esos momentos de bronca y desilusión, aflorar , los peores sentimientos de cada uno.
Hasta ahí el lector, puede pensar que la temática fue tratada ya mucho en teatro, pero llega el segundo gran mérito que tiene esta obra, un giro original y muy creativo que proponen los autores. La pareja es una como dijimos, es conformada por Clara y Joaquin, pero los actores que la representan son seis, no dos como sería normal. Como sería esto ?? Sencillo, tenemos tres Claras y tres Joaquines, no vamos a contar demasiado para conservar el suspenso, pero enseguida el espectador, descubrirá, que además de la pareja central, cada integrante de la pareja, tendrá su versión racional de la pareja y su faceta más emocional, que conformaran a la persona.
Seis actores en simultáneo, que dán vida a esas voces antagónicas, que todos tenemos dentro de nuestra cabeza y que ante cada decisión que debemos tomar, debaten internamente, para tratar de tomar la mejor resolución. Bueno, aquí magia del teatro mediante y al talento de los actores, esas idas y vueltas de nuestra mente, esos intercambios de puntos de vista, los tendremos representados frente a nosotros, siendo algo esto, que sorprende y seduce mucho a los espectadores.
Mencionamos recién a los actores y son uno de los puntales más destacados, que presenta la obra, ya que el guión puede ser muy creativo, pero si luego no se encuentran los intérpretes adecuados, que sepan tocar la partitura, la idea puede quedar desdibujada. Aquí ocurre lo contrario, ya que los protagonistas, que comparten escena casi todo el tiempo, resuelven en desafío, con maestría y logran potenciar el guión.
Vamos a mencionar a los intérpretes, ya que sus labores lo ameritan, los Clara y Joaquín, principales, si podemos llamarlos así, son lulieta Gonvalves e Ignacio Bresso. Tienen muy buena química entre ellos y transitan en gran forma, los diferentes momentos que atraviesa la pareja, pasando del enamoramiento inicial, al tedio de la convivencia y al desencanto del final. Julieta se destaca, por su expresividad, con una mirada muy particular que se transforma conforme el desarrollo lo pide. Ignacio, que es uno de los autores, tiene una actuación superlativa, sus caras, sus silencios, sus desplazamientos, todo lo hace a la perfección. Enorme su trabajo, muy festejado por el público.
Magdalena Pardo y Andrés Passeri, son los racionales, los más serios, quienes tratan de analizar con frialdad los hechos y poner paños de agua fría a las emociones Nos encantaron ambos y tienen los papeles más complicados, porque son los que deben equilibrar la energía de los demás.
Y nos quedan Julia Dorto y Franciso González Gil, son los emocionales, los impulsivos los que se mandan, sin pensarlo dos veces. Julia impresiona por su frescura y su desenfado, una verdadera revelación, al igual que Francisco que maneja muy bien la ironía. Son los más graciosos de la obra, los que más risas logran en la platea.
Hay que tener mucha coordinación y concentración, para llevar la puesta adelante y es algo que estos jóvenes actores consiguen, se los nota cómodos en escena, se los vé disfrutar la obra y esta emoción se transmite al espectador.
En este lucimiento de los actores, tiene mucha incidencia, Sofía Gónzálz Gil, con sangre artística en sus genes, consigue una puesta dinámica y muy atractiva, que logra mantener la atención del público en todo momento, que además de engancharse con la historia, en la que se vé reflejado, se ríe mucho.
Debemos destacar, el diseño escenográfico de Lula Rojo y Gastón Segalini que recrea un hogar cálido, la música original de Francisco Ruiz Barlett y un vestuario que sin dudas es distintivo y le aporta mucho a una puesta, que cuida todos los detalles.
En definitiva, estamos en presencia, de una propuesta muy atractiva, donde un libro atractivo y muy cercano, se combina con una puesta original y dinámica, llevada adelante por un elenco joven y muy talentoso, que se nota comprometido al máximo con la historia que cuentan, resultando muy creíbles y logrando que el espectador se identifique plenamente con ellos.
Asi de Simple, es una historia de amores y de desencuentros, que en clave de humor, nos harán pasar un gran momento teatral. Por todo lo mencionado, no sorprende, que la obra siga creciendo función trás función, el boca a boca rinde sus frutos y cada semana se llena la sala del Kairos, como sucedió, en la función a la que asistió quien escribe estas lineas, donde debieron sumarse sillas adicionales, porque la capacidad de la sala estaba desbordada, por un público ávido de ver la obra, que en el final de la función despidió a los protagonistas, con un aplauso muy prolongado, premiando su labor.
Recomendamos mucho la obra, una excelente demostración, de como maximizando recursos y con creatividad a flor del piel, estos jóvenes talentosos, consiguen regalarnos una estupendo momento teatral.
Pensador Teatral.