Dramaturgía y Dirección de Raffy Shart.
Una muy interesante propuesta la que llega al Multiteatro, de la mano del dramaturgo y guionista francés, de orígen armenio, Raffy Shart. Con la particularidad, de que el mismo Raffy, es quien dirige la obra, llegando al país, para tomar el timón de la puesta.
Un gran desafío para dos grandes actrices como Nora Carpena y Mercedes Carrera, ser dirigidas por el autor francés y de manera inmediata, hay que destacar el esfuerzo de producción de Aldo Funes, que apostó fuertemente en este proyecto.
La pieza atrapa al espectador, es un trhiller con mucho suspenso, donde el género policial es el que aparece en primer plano, pero también hay mucho de filosofía y de psicología, en el gran duelo escénico, que establecen las protagonistas.
Contemos que la obra, ambientada en los Estados Unidos, arranca en una comisaría, en la que la teniente ( Nora Carpena ) interroga a una mujer de aspecto muy extraño ( Mercedes Carrera ), que fue llevada a la delegación policial, acusada de asesinar en un estacionamiento, a un senador y candidato a presidente de los EEUU de varias puñaladas.
Ya fueron varios los policías que interrogaron a esta enigmática mujer, que no quiere confesar un crimen que pocos tienen dudas cometió. Porque decimos esto ? Porque hubo un chico que llegó a ese estacionamiento andando en su monapatin y pudo ver como la sospechosa, sacaba un cuchillo, del pecho del senador.
Pese a esta prueba casi irrefutable de su culpabilidad, la mujer no confiesa su crimen y proclama a los cuatro vientos su inocencia. Ella dice que cuando llegó, vió a una persona ensangrentada que huía, que ese es el asesino a quien debían buscar, que ella se agachó sobre el cuerpo y sacó el cuchillo, tratando de ayudar y ahí fue vista por el testigo.
El relato de la mujer, se acompaña con imágenes grabadas del momento relatado, lo que contribuye a dar un mayor dramatismo al mismo, siendo este un muy buen recurso. El interrogatorio entre estas dos mujeres es muy rico, la teniente quiere ejercer un dominio psicológico sobre la sospechosa, actuando por momentos con amabilidad y en otros con cierta violencia, ya que no hay forma que la sospechosa confiese y además para complicar las cosas, cuando se le pide que se identifique, dice que es Dios.
Una respuesta que desconcierta a la teniente, quien al principio toma con ironía, los dichos de esta mujer, que pareciera no estar en sus cabales, pero agudizando el ojo, se nota que es muy inteligente. Un interesante duelo entre la autoridad de la ley, enmarcada en la oficial policial y la sospechosa, que se ufana de tener la autoridad divina, generándose momentos muy graciosos y otros de profunda reflexión, donde las creencias religiosas y discusiones sobre la moral y la justicia, tienen su espacio.
La trama atrapa al espectador que intenta de descifrar el comportamiento de la extraña mujer y descubrir si miente o no. Se consigue un clima de suspenso muy logrado, en parte por el guión, pero también por la magnífica actuación de estas dos primeras figuras de nuestro espectáculo.
Realmente un placer ver sobre el escenario, a dos actrices de trayectoria como Nora Carpena y Mercedes Carreras, que encuentran en este guión profundo e inteligente, gran espacio para lucirse, ya que sus personajes tienen infinidad de matices para mostrar.
Nora es una policía de aspecto duro y frío, un personaje con muchos rasgos de masculinidad, que parece no conmoverse con nada. La actuación de Nora es magnifica y la obra le posibilitará mostrar su versatilidad. Para destacar un monólogo final que deja sin aliento por su crudeza.
Y que decir de Mercedes, a la que muchas veces la asociamos con esos personajes de madre buenita y que aquí tiene un enorme reto, para dar vida a este personaje enigmático y particular, no solo por su discurso, sino por la ropa que viste, su peinado, su maquillaje. Realmente una actuación enorme la de Mercedes, en un papel absolutamente distinto, al que acostumbramos a ver en su carrera.
Se lograron reunir dos actrices enormes y es un placer poder verlas juntas en escena, en esta sala del Multiteatro que permite que el espectador tenga una cercanía con las protagonistas, que se disfruta mucho, ya que permite seguir al detalle cada uno de sus gestos y movimientos.
De la trama no vamos a contar más, solo decir que como buena obra de suspenso, el desarrollo en algún momento, encontrará un giro inesperado para muchos y nos depara un final a todo orquesta, que sorprenderá a muchos.
Debemos resaltar la muy buena puesta que presenta la pieza, destacando la escenografía de Anibal Fuentes, simulando una dependencia policial, el diseño lumínico de Aquiles Reyes que permite transitar los diferentes momentos que presenta la trama y el vestuario de Javier Pelloni, que siguiendo las instrucciones precisas del director, diseñó el ropaje tan particular que lleva Mercedes Carreras.
En definitiva, estamos ante una propuesta muy interesante, autoria de Raffy Shart, con la versión llevada al castellano por Pablo Rey y la apuesta de Aldo Funes por este teatro serio y profundo, alejado de las comedias pasatistas. Todos los nombrados ponen su granito de arena, en este trhiller policial / piscológico que nos hará reflexionar mucho sobre temas variados, como el poder, los abusos de autoridad, la religión y la justicia, entre muchos otros, conservando un logrado clima de suspenso a lo largo de todo su desarrollo.-
Por todo lo mencionado, recomendamos Dios no existe, acabo de conocerlo ... , además de disfrutar y de sorprenderse con la historia, tendrán el enorme placer de ver en su plenitud a dos actrices de los kilates de Nora Carpena y Mercedes Carreras, brillando en escena.
Pensador Teatral.