Jueves 21 hs en Espacio Callejón ( Humahuaca 3759 )
En el marco de Teatro Líquido, que reúne a un colectivo de jóvenes autores en Espacio Callejón, llega Amor de Película, opera prima de Héctor Diaz, reconocido actor con gran trayectoria en televisión y teatro, que tiene un debut muy auspicioso como dramaturgo, ya que presenta una comedia muy divertida, que se apoya en un texto ágil y en actuaciones muy destacadas del muy buen elenco reunido para el proyecto.
La obra, toma como base la cocina de la industria cinematográfica, siendo una sátira que se nutre de situaciones de la realidad y personajes que habitan ese mundo, con puntos de coincidencias con el universo teatral y televisivo, donde aparecen guionistas que siempre dicen tener las mejores historias, debiendo convencer a productores que en muchos casos se aprovechan de su posición de poder y conviviendo con personajes de organismos oficiales que manejan subsidios y partidas que reparten con dudosa discrecionalidad.
Uno de los méritos de Héctor, es tomar todos estas situaciones reales y llevarlas a un guíón teatral, donde realidad y ficción estarán en permanente pelea y donde muchas veces esa ficción se irá armando y modificando de acuerdo a hechos que se irán produciendo en la vida diaria.
Tratando de no contar demasiado, digamos que Amor de Película, nos contará la historia de Julián un guionista cuarentón y algo anticuado, al que parece le pasó el cuarto de hora, en cuanto a sus creaciones y hace tiempo no logra que sus proyectos de guiones sean seleccionados.
Su supuesto amigo Federico, dueño de una productora de dudosa reputación, viene rechazando sus trabajos por no ser los que pide el público. De manera casual cuando está terminando una fallida reunión entre guionista y productor, llegará Paula, una joven youtuber, con miles de seguidores de Instagram y mucha llegada en las redes, que estaba citada justo ese día.
Al productor, apremiado por presentar rápido un guión exitoso, a un oscuro funcionario que maneja subsidios y le debe favores, se le ocurre una idea interesante, que el guionista y la youtuber, trabajen juntos escribiendo un guión, que debe tratar de ellos mismos, dos personas de distintas generaciones, que se unen para escribir una historia y cuando están avocados en esa tarea, aparece la llama del amor entre ellos.
La idea del productor parecía muy buena, lo que no imaginaba, era que en el argumento encargado, debido a la picardia de la youtuber, lo incluiría en la trama, junto a su influyente secretaria, como así también el funcionario del organismo que maneja los subsidios. Cuando los involucrados reciben los primeros capítulos y descubren sin quererlo, ser parte de la historia, los ánimos se crisparán y harán sus mayores esfuerzos, para parar todo o en su defecto quedar bien parados en en la trama.
Hasta allí contaremos, dejaremos que sea el espectador cuando vea la obra, descubra como irá cambiando el argumento a medida que los autores e involucrados, se van enterando de lo que irá sucediendo y reaccionando en consecuencia.
La trama es divertida y muy entretenida, evitando caer en lugares comunes y atrapando al espectador con un relato actual y moderno, que pondrá la lupa en las diferencias generacionales de los protagonistas y en los entretelones de la industria cinematográfica.
Además de la elaborada dramaturgia, entendemos que una de las razones, que explican la muy buena respuesta de público y de crítica que tiene la obra, es explicada por el muy buen elenco elegido, todos actores de buena experiencia en el off.
Es un elenco muy parejo y los cinco actores, encuentran espacio para lucirse y mostrar sus credenciales. La pareja de guionistas, tal vez es la que más de destaca, ya que muestran muy buena química entre ellos y juegan muy bien la partida del choque generacional. Nos referimos a Gerardo Chendo, como Julián, a quien ya elogiamos mucho por su trabajo en Lo Único que hice fue Jugar y que aquí compone a un escritor medio pasado de moda, que lucha por no perder vigencia y su lugar ante la nueva ola. Un personaje muy querible el que compone Gerardo, un actor que siempre genera empatía con la platea.
La youtuber que lo deberá acompañar en la tarea encomendada es Luli Torn, que compone a Paula, una millennial algo caprichosa, con algunos tics y autoestima bien alta, que maneja a la perfección la tecnología y las redes sociales, sin miedo en ir a buscar sus objetivos. A Luli, también la vimos lucirse en un par de obras en El Callejón y en cada nuevo trabajo, notamos su crecimiento. Aquí compone un personaje complejo, que será clave en la historia y lo hace en gran forma. Como dijimos en anteriores crónicas, Luli es una actriz joven con un futuro enorme.
Pero no seamos injustos con Rubén de la Torre, que compone a un productor bastante chanta y a la histriónica María Inés Sancerni, su asistente influyente y manipuladora, que siente mucho cariño por su jefe. Forman una dupla muy buena y se lucen muchísimo ambos, con escenas muy graciosas, que no adelantaremos aquí.
Por último resta mencionar a Javier Nikilson, como Barzola o Fratuchi. Desde un papel secundario, realiza una composición magnífica, con una gestualidad y unos cambios de registros notable, siendo el personaje que más hizo reír a quien les habla
Como puedan apreciar en la descripción realizada, el elenco es muy parejo y se los nota muy a gusto con la obra, se divierten en escena y en eso también influye una dirección que les dá libertades.
La puesta tiene varios elementos para destacar, principalmente el diseño escenográfico que divide el escenario en mitades, dejando de un lado la oficina de la productora y del otro la casa del guionista, lo que permite ver en varios momentos acciones simultáneas, recurso muy bien explotado por el autor y que contribuye a la dinámica de la obra.
En resumen, otra buena opción que ofrece Teatro Líquido, permitiendo el debut de Héctor Díaz en la dramaturgia, para disfrutar de una divertida comedia que además de divertir mucho, dejará al descubierto algunas intimidades, que pertenecen al lado B del cine.
Amor de Película, viene agotando localidades en cada función de desde su estreno y por eso no extrañan los prolongados aplausos, con que el público, despide a los protagonistas al término de la función, con una sonrisa, por el momento teatral vivido.
Pensador Teatral.