Dramaturgia de Nicolás Perez Costa, Dirección Musical de Pablo Flores Torres y Coerografías de Barby Majule.
Una viaje mágico nos propone Nicolás Perez Costa, trayendo a escena, a los Hermanos Gimm, alemanes ellos, Whillhelm y Jacob sus nombres, Su aporte a la cultura fue muy importante, ya que, sin ellos casi ningún cuento infantil, existiría hoy.
Allá por el año 1806 y durante seis años, los hermanos Grimm, se dedicaron a reunir cuentos, mitos y leyendas populares, transmitidas hasta entonces de forma oral. Su objetivo, no era solamente entretener a los niños, sino que querían honrar una parte de la cultura alemana, que creían se perderían para siempre.
Publicaron varios libros de cuentos, vendiendo más de mil millones de ejemplares, de sus obras que se tradujeron a 170 idiomas. Entre los cuentos que rescataron podemos mencionar a La Bella Durmiente, Cenicienta, La Sirenita, Hansel y Gretel, Pulgarcito, El Gato con Botas y Blancanieves, entre muchos otros títulos célebres..
Realmente una gran idea y un muy buen homenaje a personajes con Los Grimm, que como se aprecia en la breve introducción dada, tan importante legajo cultural nos legaron.
Y gran mérito, poder cristalizar sus historias, con este entrañable musical, que con más de 30 actores en escena y con un despliegue escénico realmente de lujo para el teatro independiente, nos llevará al mundo onírico de los Grimm.
La obra nos propone viajar hacia un mundo fantástico, donde los cuentos serán los protagonistas de la noche, con mucha magia y poesía que los personajes creados, nos regalarán en cada cuadro..
Hay muy buenas actuaciones, sin dudas, la que más se destaca es la de Nicolás Perez Costa, el líder del proyecto, con experiencia en musicales y un registro vocal excelente. Sus creaciones son sinónimo de calidad, el año pasado vivimos su 8433 Oscar Wilde y este año redobla la apuesta con este hermoso espectáculo, del cual es el gran protagonista siendo Willlhelm, el mayor de los Grimm. Nuestras felicitaciones para Nicolás, por la iniciativa y por su lucimiento, ya que muestra todo su talento y versatilidad.
En esta ocasión lo acompaña en la aventura, su hermano menor, Agustín Perez Costa, que aquí es Jacob, el otro Grimm, es quien acompaña a Nicolás, en la estadía en esa posada embrujada, mostrando tener los genes artísticos en la familia.
Y si hablamos de brujas, hay que nombrar a Victoria Stecca, como Berta, que compone un gran personaje, siendo la regente de la posada y la malvada de la historia. Se luce mucho en las partes cantadas, con gran presencia escénica y un histrionismo a flor de piel. Gran lucimiento de Victoria.
Son treinta personajes, imposibles mencionar a todos en esta reseña, pero mencionemos a Juan Pablo Ragonese y Natalia Trabol Vega, como los hermanitos Hansel y Gretel.
Rocio Noziglia, es la bella y misteriosa Dorothea. Federico Rojas es Dirk. Jimena López es la angelical Danielle, Fiorella Fantau como La Sirenita y Mora Fernández como Aurora, cumplen papeles femeninos destacados.
Hernán Kufert es el misterioso Rumpelstiltskin, a quien le gusta dejar paquetes en la habitación de los Grimm.
Nombramos solo a algunos de los personajes, seguramente los de mayor participación, quedaron muchos sin mencionar, por un tema de espacio de esta reseña, pero todos hacen su aporte al espectáculo, con sus destacadas participaciones.
Es hora ya de hablar de la muy buena dirección musical de Pablo Flores Torres, con letras originales y muy buenos cuadros, fundamentales logicamente al tratarse la obra de un musical, con un sonido potente, que le dá mucha vigor a la puesta.
Excelente el trabajo de Barby Majule, ejecutando coreografías divertidas y muy bien coordinadas, algo nada sencillo, al ser tantos actores en escena. La vimos lucirse el año pasado en Sherlock de Pepito Cibrian y aquí vuelve a hacerlo. Es un punto muy fuerte de la puesta, el aporte de la talentosa Barby en las coreos. haciendo lucir a los protagonistas y al ensamble, dando mucho dinamismo a la trama.
Superlativo el diseño de vestuario de Fernando Crisci Munz, la realización de Sofía Escalante, Mariana Etchevestez y Gonzalo Cabalcabue. Como dijimos son muchos los actores y el vestuario se destaca mucho. Ardua labor también de Sandra Sen en maquillaje.
Como puede apreciar el lector, hay un gran trabajo en equipo, donde todos aportan su granito de arena, para darle riqueza y mucho colorido a la puesta.
En definitiva, fueron varios los motivos, por lo que quedamos gratamente sorprendidos con Los Grimm, en primer lugar por la atractiva historia que nos cuenta, en segundo término por las muy buenas actuaciones que tiene la obra, con un elenco joven, que logra destacarse mucho por su talento y compromiso. Y por último, la satisfacción, de ver plasmado este ambicioso proyecto, en una excelente puesta, en la que se cuidan todos los detalles, algo muy meritorio, para un espectáculo del off, donde todo se haca a pulmón y con pasión, por eso hay que destacar la apuesta y el resultado final.
Solo queda recomendar la obra, realmente vale la pena verla, van a disfrutar de un hermoso espectáculo y viajarán junto a los Hermanos Grimm, por este maravilloso y fantástico mundo de los cuentos infantiles.
Pensador Teatral.