Dramaturgia y Dirección de Javier Naudeau.
Domingos 20 hs en El Portón de Sánchez ( Sánchez de Bustamante 1034 )
Una interesante propuesta, llega de la mano de Pareidolia, esta rara palabra que aparece en el título de esta tragicomedia escrita por Javier Naudeau, que nos hablará de los sueños que todos tenemos. Esos deseos por los que vamos a luchar en la vida y que servirán como brújula de nuestras acciones. Cuando somos chicos o adolescentes, solemos proyectar sueños y objetivos, que cuando somos adultos podemos ver concretados en algunos casos y en otros no, estando asociado allí el tema de la desilusión y el bajón que llega, cuando vemos que vida transcurre y no estamos siendo las personas que imaginamos en algún momento.
La obra pondrá el foco, en una familia tradicional, de matrimonio con 2 hijos, pero bastante disfuncional, ya que algo no anda bien entre sus integrantes. Si bien viven bajo el mismo techo, cada uno parece estar inmerso en su mundo, con sus problemas y sus válvulas de escape, individuales en todos los casos, sin compartir prácticamente nada con los otros, aunque en apariencia son una familia normal.
Y a ese hogar llegará Willy, amigo de Luciano, el hijo adolescente de la familia. Su llegada cambiará la rutina de aquel hogar, ya que llegará con una propuesta tan atractiva, como peligrosa. Si les sale bien el negocio que planea, ambos podrán cumplir su sueño. Willy viajar a Francia para encontrarse con su madre, a la que hace muchos años que no vé. Y en el caso de Luciano, poder viajar a Málaga, ciudad que hace mucho desea conocer. Ninguno trabaja aún y para poder viajar, necesitan dinero para comprar los pasajes. El negocio turbio que tienen entre manos, sin dudas puede acercarlo, pero claramente no están midiendo bien los peligros que envuelve la actividad en que van a incursionar.
Pero hay otra noticia que aparecerá y será una sería amenaza, para avanzar con el negocio que los amigos tienen en mente. Nerea, la menor de la familia, anuncia un atraso y al poco tiempo confirmará que está embarazada. La noticia cae como una bomba en aquella familia, ya que Nerea tiene solo 16 años y peor se pondrá el panorama, cuando descubran que el padre del bebé que viene en camino, es nada menos que Willy. La noticia no le causa ninguna gracia a Luciano, que siente que su amigo lo traicionó al no contarle nada y lo hizo en el momento menos oportuno, ya que esta novedad a simple vista, complicará los planes de viajar juntos a Europa, de los que venían hablando en los últimos días.
La situación se pone tensa en la casa. Willy se siente eufórico con la noticia, lo seduce la idea de ser padre, pero más aún poder encontrar una familia y un hogar que lo cobije, ya que es algo que le falta y añora. La madre y el padre, luego de una primera reacción negativa no ven con malos ojos, que la familia crezca, con un nieto y sumar además a Willy, que para ser aceptado, hace muy buena letra y de a poco parece quitar el lugar que ocupa su amigo en la familia.
Y hasta allí vamos a contar, para mantener el suspenso, para complicar las cosas, diremos que Nerea no está para nada decidida en seguir adelante con el embarazo y el tema del aborto sobrevuela la trama. Además otra mala noticia se revelará en la casa, que perderá la poca armonía que conservaba, pero cumplimos con nuestra palabra y hasta allí contamos. Para saber cual será el desenlace de la historia, deberán ver la obra.
La trama tiene una muy buena dinámica y aunque el argumento parece sencillo, tiene un trasfondo muy profundo que sobrevuela el texto en todo momento. Además la historia tiene una cuota de intriga que logra atrapar al espectador y en esto influye mucho las muy buenas actuaciones que presenta la obra. Vayamos entonces con algunas lineas de cada integrante de elenco, ya que sus trabajos así lo ameritan.
Comencemos por la parte joven del elenco y allí nos encontramos con la revelación de la noche. Nos referimos a Juan Manuel Artaza, el hijo de Nito, que en su primer protagónico en el teatro independiente, muestra su carisma y personalidad, para ponerse en la piel de un adolescente de veinte años, lo que representa un desafío, ya que el ya tiene más de treinta y retroceder mas de diez años para el personaje, no es algo sencillo. Pero Juan Manuel, no solo supera ese desafío, sino que además realiza una estupenda composición, de un Willy comprador, cuyo mayor sueño, es formar parte de una familia. Muy buen trabajo de Juan Manuel, que si se lo propone, tiene una carrera prometedora por delante.
Siguiendo con el ala adolescente del elenco, destacar las composiciones de Juan Cottet, como Luciano, un hijo rebelde, como casi todos en esa edad, que por no medir los peligros se meterá en tierras peligrosas. Violeta Postolski, es Nerea, como una niña ingenua, que en su paso a ser una mujer, se encuentra con un embarazo impensado. Muy buena la dupla de hermanos entre Juan y Violeta, graficando lo inmaduro que se puede ser en la adolescencia.
Sigamos con los padres, arrancando por Heidi Fauth, una estupenda actriz, a la que elogiamos ya muchas veces desde nuestro sitio, pudiendo aquí, comprobar nuevamente su enorme versatilidad, en este caso representado a una psicóloga con pocos pacientes, que no está contenta con su carrera profesional y tampoco con su vida. Nos encantó la composición de Heidi. Completa el elenco, Claudio Amato, a quien vemos por primera vez en escena y nos sorprendió muy favorablemente, en su papel de Miguel, un padre bastante ausente, que se comporta como un adolescente, embobado jugando con la play station. Con el avance de la trama, veremos que este comportamiento posiblemente quiere ocultar una situación que no se anima a blanquear. Muy buen trabajo el de Claudio, para un personaje que no era sencillo.
Nos extendimos un poco hablando de los protagonistas, pero como mencionamos antes, los trabajos así lo merecían Un acierto de Javier Naudeau, en la elección de un elenco heterogeneo en edades, pero que funciona muy bien en el conjunto y se nota muy cómodo con el texto, algo que se nota en la fluidez de la trama y en la credibilidad de los personajes.
No queda demasiado para agregar, Pareidolia es una propuesta muy actual que toca gran cantidad de tópicos, como el tema de las adicciones, no solo a sustancias prohibidas, sino también a los aparatos electrónicos que la tecnología nos acerca. También refleja como el mundo actual, presenta peligros que los adolescentes muchas veces no evalúan en su real dimensión. Y como línea general, la pieza, muestra lo difícil que puede resultar cumplir nuestros sueños y seguir el camino hacia la felicidad, que todos creemos saber donde se encuentra, pero pocos logran acceder.
El autor además es un buen observador de la realidad y pone el foco en una temática muy actual, como es la falta de comunicación que existe en muchas familias modernas, donde cada integrante hace la suya y poco se interesa por la realidad del otro. Cuando están juntos por lo general, tocan temas triviales, superficialidades y prefieren eludir el tratamiento de los temas conflictivos, conociendo los mismos por lo general cuando ya es demasiado tarde.
El texto de Javier Naudeau, como dijimos es profundo, introduciendo en el mismo momentos de humor y algunas situaciones exageradas, que parecen atenuar el conflicto planteado. Las destacadas actuaciones que presenta la obra, potencian el texto y nos invitan a reflexionar sobre sueños, desilusiones y como muchas veces elegimos mirar para otro lado, en vez de afrontar los problemas, algo que por lo general, resulta muy perjudicial para todos.
Pensador Teatral.